Enrique Radigales
Domingo
Impresión digital sobre lienzo y vinilo y óleo sobre madera de boj
Lienzo 50 x 70 cm. Vara 130 cm x 5cm
2015
Domingo rinde homenaje a un individuo homónimo cuyo computador, al morir, fue desarmado y revisado pieza a pieza por al artista, con el ánimo de reconocer en estos objetos físicos los rastros metafísicos del propietario: un alegato en torno al individuo y la desaparición -disolución de su conciencia- desde la volatilidad de la existencia humana. Dotando a la materialidad de los elementos de una carga simbólica, la base de la pieza está hecha de boj, arbusto mágico del Pirineo que crece muy lentamente, de una madera considerada noble y tan densa que no flota en el agua. En equilibrio sobre la vara se suspende un lienzo impreso con partes escaneadas del computador, al cual se han acoplado cual relieve algunos objetos provenientes del PC. El propósito de esta liturgia de cuatro meses ha sido poner en valor la consciencia de Domingo, un hombre octogenario que disfrutó de la compañía de este ordenador durante los últimos años de su vida, sin llegar jamás a actualizarlo.