Alba Triana
La práctica artística de Alba Triana se centra en explorar la inteligencia primordial de la naturaleza. Sus obras, que incluyen instalaciones interactivas, espacios resonantes, esculturas de sonido y luz, y objetos vibracionales, son híbridas y cruzan los límites de un conjunto diverso de disciplinas. La revista Artburst la ha descrito como una “escultora del sonido que explora la interfaz entre las ciencias naturales y la música… combina rigor y finura poética”.
Triana ha recibido honores como el South Arts State Fellowship (EE. UU.), Civitella Ranieri Fellowship (EE.UU./ Italia), así como comisiones, residencias y subvenciones por parte del Kronos Quartet (EE. UU.), Coincidencia/ProHelvetia (Suiza), Oolite Arts (EE. UU.) y L’Institut International de Musique Électroacoustique de Bourges (Francia), entre otros. Sus piezas han sido presentadas en espacios como el Museo de Arte Moderno de Bogotá – MAMBO (Colombia), 104 París, NÉMO—Bienal de Artes Electrónicas de París (Francia), CCCB—Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (España), ISEA—International Symposium of Electronic Arts (Colombia), CMMAS—Centro Mexicano para la Música y las Artes Sonoras (México), y en festivales como Sonar+D Festival (España), Subtropics (EE. UU.), Futura, Synthèse (Francia) y Zilele Muzicii Noi (Moldavia).
Campos Delirantes (Solo)
Instalación cinética y sonora. Esfera metálica suspendida en campo electromagnético variable y resonador de aluminio.
250 cm x 13.5 cm x 26 cm
© Casa Hoffmann 2023
La obra de Alba Triana forma parte de colecciones como la Colección SOLO (Madrid), la Colección Otazu (Navarra) — Premio ARCO al coleccionismo, la Colección de Arte del Banco de la República (Colombia), Mosquera Collection (Miami), así como al Portafolio de Productos Culturales de Alta Calidad del Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia.
En Campos Delirantes (Solo), una esfera metálica suspendida danza, orbitando alrededor de una bobina electromagnética, en una coreografía azarosa que genera sonoridades variables cada vez que golpea un resonador metálico, produciendo vibraciones en diferentes frecuencias. Los desplazamientos, giros y órbitas revelan alteraciones en el campo electromagnético, manifestando el material intangible con el que cada esfera dialoga. Por medio del movimiento y el sonido, Campos Delirantes (Solo) reflexiona sobre la inseparable conexión y balance entre el entorno físico y las fuerzas imperceptibles que rigen el mundo natural.