Margaret Mariño
Tropel de viejas novedades
Arcilla, agua, piedras, sabanas, manteles
60 x 60 x 60 cm aprox
2017
“Siniestro es todo lo que estando destinado a permanecer en secreto, en lo oculto, ha salido a la luz. […] Desde lo entrañable y lo hogareño, se desarrolla el concepto despojado a los ojos ajenos, lo oculto, lo secreto, plasmado también en múltiples contextos…”
En lo bello se encuentra algo siniestro, algo que debiendo permanecer oculto, se revela. Las complejas formas ornamentales cargan una enceguecedora impresión de belleza, formas que han evolucionado paulatinamente a lo largo del tiempo; patrones de inocente apariencia tienen dentro de sí una historia que los hace poseedores de cargas simbólicas, políticas, conceptuales y emocionales que plantean un misterio en su interior, difícil de percibir. Desmantelar las veladuras que impiden ver lo siniestro y la profundidad oculta en estos patrones y en lo que representan, es el punto de partida en este proyecto.
En estas piezas habita la dinámica entremezclada del recuerdo y del olvido, están inmersas en lo siniestro de lo innombrado, desde la sombra que se materializa cotidianamente, sin dar la cara. Realizadas con piedras, arcilla, agua, manteles y pedazos orgánicos son muestra de la unión de dos naturalezas contrarias, el salvajismo de la arcilla, la domesticidad del patrón ornamental. La arcilla va irrumpiendo abruptamente por cada uno de los agujeros que forman esta estructura, el resultado de estos dos lenguajes que unidos luchan por mantenerse en ellos mismos, es extraño. Se evidencia lo siniestro del silencio doméstico, de lo que no se habla, de lo que se calla, de lo que se oculta, de lo innombrable. Ese silencio comienza como recuerdo, pero termina disfrazandose de olvido para sobrevivir.